Capítulo 9

Encerrada entre las cuatro paredes de mi cuarto con los ojos apunto de largas lágrimas pero no quería llorar, tenía bronca acumulada no porque mi papá me sacara la tarjeta de crédito sino por la maldita costumbre que tiene para decir las cosas, si me las dijera bien por ahí las entiendo pero siempre es con mala onda.
Estaba tapando mi cara con mi almohadón blanco y negro cuando entra mi mamá con un vaso de jugo exprimido para que tome, la mire para luego seguir en la mía.
Elisa: hola, yo no te hice nada
Lali: siempre lo mismo, no me podes defender no?
Elisa: es que tu papá tiene razón por ahí no fue la manera de decirte lo que pensaba
Lali: nunca va a cambiar la forma de hablarme? esta dos días bien conmigo y los demás mal.
Elisa: sos bastante rebelde es por eso
Lali: ahora yo soy rebelde? bueno cuando se les ocurra algún lindo adjetivo hacía mi persona me encantaría escucharlo.
Elisa: no exageres, la tarjeta te la va a suspender hasta que te pongas a trabajar. Tenes edad para hacerlo y sos muy capaz
Lali: no lo entiendo, le dije que me ofrecieron trabajo en una empresa y me dijo que no
Elisa: porque era de la competencia, porque no trabajas con él?
Lali: nos matamos al tercer día
Elisa: pensalo hija es una buena oportunidad para vos, por ahí les sirve para entenderse más no te parece?
Lali: él te pidió que vengas a hablar conmigo no?
Elisa: si -dijo mientras me acomodaba el pelo- vamos, baja en un rato y habla con él seguro llegan a un acuerdo
Lali: necesito tiempo para descansar y veo que hago, puedo?
Elisa: si podes. Que descanses bien hija -beso en la mejilla- te quiero.
Lali: gracias -sonreí-


Yo te vi llorar
cuando nadie te miraba,
escondiendo esa lagrima,
que se te escapaba.


Intente poder dormir pero me fue casi imposible, ya las lágrimas no las podía sostener lo bueno es que escuche que mis papás habían salido de la casa así que iba a estar más tranquila. Cualquier problema se puede resolver pero cuando son problemas familiares afectan mucho más que cualquier otro, bueno eso es lo que en general me pasa a mi. Salí para ir al baño y me lo encontré a Peter que salía de ahí.
Peter: queda libre
Lali: el baño?
Peter: si a eso me refería. Cómo estás?
Lali: te podría decir que bien pero no me gusta mentir
Peter: te noto mal así que no te hubiera creído -intenté sonreír- problemas familiares?
Lali: mi papá es el problema, me quiere cortar todo y que me ponga a trabajar
Peter: bueno pero que trabajes es bueno
Lali: si es verdad el tema es que no me lo dice bien. Bueno vos habrás escuchado algo de la conversación
Peter: si algún que otro grito escuche
Lali: perdón somos muy pasionales en esta familia casi normal.
Peter: vos sos bastante de ir al frente con tu viejo
Lali: con todo en general
Peter: ah eso no sabía
Lali: ya me irás conociendo. Vos te vas ahora no?
Peter: si ya termine, mañana vengo temprano nuevamente
Lali: que bueno -sonreí- digo que bueno porque necesitabas el trabajo
Peter: si mucho
Lali: me alegro entonces. Voy a lavarme la cara, permiso -entré- nos vemos.
Peter: nos vemos.
Cerré la puerta para lavarme mi cara porque se me iba a hinchar como me pasa cuando lloro mucho. A los cinco minutos me toca la puerta Emilio, él era como mi psicologo y bastante chusma porque yo todo no le quería contar pero siempre terminaba contándole eso o más.
Lali: dejamos la sesión para mañana si? Me voy a ir a lo de Rocío
Emilio: venís tarde?
Lali: no creo porque tengo que estudiar
Emilio: bueno anda Lali pero mañana hablamos si?
Lali: te lo prometo -beso de despedida-
Emilio: ya se fue tu galancito te digo para que no te pongas a espiar por donde anda
Lali: cualquiera pero cualquiera mal -me reí-.

Yo te vi tan triste y tan solito,
que hubiera dado mi vida,
por curarte las heridas.