domingo, 12 de febrero de 2012

Capítulo 125


Y me quedé soñando, con la ilusión a cuestas,
con la esperanza guardada,
en el bolsillo roto de un pantalón,
en el baúl sin fondo de mis decepciones.


Me desperté en Brasil a las doce del mediodía y con muchísimo calor. Me puse un short cómodo y una remera para ir a comer algo a la cocina donde estaban todos comiendo tostados y tomando jugo exprimido de naranja, yo les deje un beso y me senté para comer con ellos tenía mucha hambre. Cuando terminamos nos fuimos los cinco caminando hasta la playa porque quedaba a solo dos cuadras, Fernando y mi mamá llevaban reposeras en las manos mientras que Peter y yo teníamos de la mano a Lara para que no crucé la calle ni nada porque había mucha gente. La arena era muy clarita y estaba re caliente por el clima sin dudas, Lara se había instalado con sus juegos playeros y los más grandes estaban leyendo el diario y charlando, nosotros con Peter fuimos directo a meternos al mar que estaba ideal. 
Lali: placer estar acá
Peter: si, yo nunca había venido a Florianópolis pero es re lindo
Lali: eso que no recorrimos nada, si vos queres a la nochecita paseamos un poco
Peter: me encanta la idea
Lali: amor mira como se divierte Lara es una genia la enana
Peter: si, ella esta chocha de que vinimos. Hoy a la mañana fue y me despertó
Lali: a mi se me acostó en la cama
Peter: -se ríe- hay que viva si hubiera sabido iba a dormir yo también a ese cuarto
Lali: bueno hoy vas entonces y listo. En mi cama hay lugar para los tres -le di un beso- me mando mensaje Cande de que la están pasando lindo pero que nos extrañan
Peter: ellos mañana ya se vuelven por lo que me dijo Agus, así que ya los vamos a ver
Lali: si ya los veremos de nuevo. Voy a ir a tomar sol, vos queres?
Peter: te acompaño pero yo me pongo a jugar con mi hermanita
Lali: dale dale. -le di la mano-

Será, que aún no se llenaba la luna.
Será, que el tiempo fue menguando nuestras ganas.
Será, será, será, serán las ganas, será.


Fuimos a la orilla y me quede un rato a jugar con ellos pero pronto fui y me tire en una reposera de las que se alquilaban en el lugar. Mi color era genial, muy tostadita, mis dientes blancos se notaban más que nunca y mi bikini blanca era ideal. Con mi mamá nos pusimos a hablar bastante aunque nuestras charlas eran algo interrumpidas porque había Argentinos y Uruguayos que la conocían a ella y le pedían fotos las cuáles las sacaba yo con mis propias manos. 
Fernando después de unos minutos saco su súper cámara profesional y empezó a sacarnos fotos a todos, Lara y yo nos sacamos unas siete y con mi novio unas cinco para ver cuál nos convencía más para ponerla en un lindo cuadro. 
Lali: bueno ahora una con mami -le pedí a Fernando que me saque-
Carolina: espera que me peino un poco -se acomodo el pelo- listo! -ahí nos saco la foto-
Peter: deja la cámara ahí y la programamos para sacarnos una los cinco
Fernando: bueno. Lara vos te pones abajo de Lali así entramos todos en cuadro. Digan wisky -y lo pronunciamos todos- listo, quedo hermosa
Carolina: si que bella
Lali: hay tu carita amor, saliste hermoso -él me abrazo de atrás-
Peter: no tanto como vos -me dio un beso- te amo
Lali: yo también cosita linda. Qué hora es mami?
Carolina: siete y media es temprano todavía
Lali: si pensé que era más tarde
Peter: vamos a caminar por la playa? Quiero darte un regalo -me dijo despacio-
Lali: dale vamos. Ya volvemos nosotros nos vamos a caminar
Lara: yo quiero ir
Fernando: no, ya vienen
Carolina: después te llevan a tomar helado pero ahora se van un ratito solos
Lara: bueno -cruzó los brazos, estaba indignada-

Y me quedé en suspenso, con una historia breve,
en los niveles más bajos de mis latidos del corazón.
Entre lo inverosímil de mis frustraciones..


Fuimos caminando de la mano por la orilla en la playa había algo de gente pero se iban yendo de a poco. Peter me daba a cada rato besos en la mejilla, estaba bastante cariñoso conmigo yo lo notaba. Llegamos hasta la punta y nos sentamos en uno de los muelles, justo arriba de unas piedras gigantes que se encontraban rozando el mar, él me abrazo y nos empezamos a besar eso es lo que tenia de bueno nuestra pareja no perdíamos fácilmente la magia. 
Lali: es increíble este lugar no te parece?
Peter: si, se siente como otro aire al de Buenos Aires
Lali: si por supuesto, acá la gente esta más tranquila y sin tanto estrés
Peter: además estamos nosotros dos
Lali: claro -reí- qué regalo me queres dar?
Peter: sos ansiosa che!
Lali: muy y lo sabes, lo peor que hiciste fue decírmelo ahora no se me imagino quinientas cosas
Peter: a ver tirame alguna...
Lali: no se. Queres que vayamos de viaje a otro lado?
Peter: no
Lali: me compraste ropa? Ah no porque no tenes ninguna bolsa. A ver... Me queres pedir casamiento? Somos algo chicos me parece
Peter: -se ríe- por ahora eso no, igual buena idea
Lali: que nos vayamos a vivir juntos?
Peter: re daría no? Pero igual no es eso
Lali: bueno decime entonces
Peter: -saca una cadena con un corazón que se abría y tenía una foto chiquita de nosotros
Lali: me encanta, hay que original
Peter: es para que lo uses o guardes como quieras
Lali: te amo te amo -le di un besito- ves que sos un tierno, no hay novios como vos
Peter: y otro así no vas a conseguir te lo aseguro
Lali: lo se y vos una novia como yo? Bueno mejor no contestes...
Peter: nunca voy a encontrar una novia como vos primero porque no hay, segundo sos única y tercero vos vas a ser mi novia siempre o mi mujer en un futuro
Lali: más dulce lo que me decís. Me la quiero poner, dame la cadenita
Peter: yo me ocupo -se acomodo para colgármela en cuello-
Lali: gracias gracias me encantan todo este tipo de cosas, me vas a hacer llorar y yo que me comporto como una pendeja, bue soy una pendeja
Peter: sh no digas eso. Te amo
Lali: te amo te amo -bese sus labios- sos el amor de mi vida.

No hay comentarios:

Publicar un comentario